viernes, 16 de enero de 2009

El epitafio de Calderón

Ha vuelto a suceder. La prensa, tan voraz y tan ávida de poder, se ha vuelto a cargar a un cargo directivo importante es este país. Quedan lejos los tiempos del periodismo de conspiración, pero en los últimos meses hemos asistido a otro ejemplo similar. Sólo que esta vez no ha caído ningún presidente de gobierno, sino el del Real Madrid, que tiene una trascendencia similar, por indecente que parezca.

Cuando tengamos algo más de perspectiva, convendría analizar el papel de los principales medios del país con respecto a la figura de Ramón Calderón. Desde el odio visceral de La Sexta y el diario Marca, rabiosos por no tener los derechos televisivos del equipo más seguido del país, a la ambigüedad de PRISA, por una parte casi 'dueños' del club, por otra temerosos sabiendo que esa situación tenía las horas contadas. Si incluso el ubicuo Pedrojota, cómo no, ha estado metido en el ajo, infiltrando a su querido Miralles, ese tan aficionado a las camaras ocultas pseudo-legales, en la directiva merengue. Anda que no se veía venir...

Pero, cómo se llega hasta ahí? Cómo un club del tamaño del Madrid se convierte en el juguete de varios periodistas codiciosos? Todo comienza con la discutida victoria del propio Calderón en las elecciones, tras la polémica de los votos por correo. Calderón nace con el pecado original, como buen católico, y busca en el apoyo mediático de PRISA su bautismo particular.

Pero Calderón se equivoca, y muchas veces, en las formas, que son totalmente impropias de alguien que ocupa su cargo. Pasará a la historia por su nula capacidad de cerrar su bocaza, por criticar abiertamente a sus jugadores, por prometer hasta el hartazgo jugadores imposibles de fichar o por 'celebrar' un título antes de ganarlo. Se ha vendido fatal. Cuando ha hecho cosas bien, las ha manchado con sus formas. Cuando lo ha hecho mal, ha parecido catastrófico. Los líos de la Asamblea han sido un cruel y esperpéntico colofón a su presidencia.

Ahora que todo es hacer leña del árbol caído, no está de más recordar que desde el punto de vista deportivo, los 2 primeros años de esta directiva son mucho menos funestos de lo que se pretende vender. Ahora nadie recuerda la herencia nefasta recogida, una plantilla indigna de la entidad que se tenía que enfrentar contra uno de los muchos barças imparables de los últimos años. Y nadie valora que así se ganaron 2 ligas y se cambió casi el 80% de la plantilla. Todo el mundo se queda con que algunos jugadores fueron excesivamente caros, cuando quizás la mayoría se hayan revalorizado. Qué cosas.

Empieza a caerse el castillo precisamente en el momento en que Calderón quiere 'jugar a ser Flo', cuando tienen una plantilla muy completa y deciden fichar un 'galáctico' como Cristiano Ronaldo, obviando cualquier posible 'plan b'. La afición reclamaba un crack mundial y esa necesidad de Calderón de demostrar que no sólo Florentino podía traerse a los mejores del mundo fue lo que terminó por hacer temblar los cimientos del proyecto. El resto de la historia y sus daños colaterales son de sobra conocidos.

Precisamente, el propio Florentino es visto por muchos como el cerebro en la sombra de la campaña de acoso contra el recientemente dimitido presidente blanco. Para muchos Florentino es una especie de Arvin Sloane en la serie de tv Alias, o por poner un ejemplo del mundo real, una versión patria de Vladimir Putin. Un conspirador extraordinario, más listo que el hambre, siempre un paso por delante de la situación. Y siempre sin mancharse, claro. Ha conseguido que la cadena supuestamente más de izquierdas de la parrilla le haya hecho la labor de mamporrero. Si eso no es talento...

No vale la pena decir que será el próximo presidente madridista, salvo sorpresa mayúscula. Y por mayoría aplastante, nos atrevemos a pronosticar. El ser humano es raro y desmemoriado; al fin y al cabo Menem estuvo a punto de repetir como presidente de Argentina hace no mucho, o el PP ganó en Muxía tras dejar cubrirse sus aguas de sucio petróleo.

Florentino heredará una plantilla bastante buena (me atrevería a decir que muy buena), y hará lo que mejor sabe, traerse a uno de los grandes. Habrá aprendido de sus errores, dicen... habrá que verlo. Eso sí, cuando vuelvan los títulos, que nadie se olvide que Gago, Sneijder, Pepe o el Pipita, por no hablar de Robben, ya estaban cuando volvió el mesías. Que no nos vuelvan a vender la burra de los galácticos, los zidanes y pavones, etc... Porque, en plena euforia, nos podemos volver a creer la misma tontería. Y la caída esta vez sí que sería mayúscula.

No hay comentarios: