Éste era el año para intentarlo con bastantes garantías de éxito. Ganamos el año pasado la Liga con comodidad, y teníamos un equipo muy bueno, por mucho que la prensa se empeñase en negarlo. Sólo quedaba hacer un par de retoques e intentar asaltar el trono europeo.O al menos, discutirle el título de igual a igual a los ingleses.
Pero no. Cuando más tiempo tuvimos, peor lo hicimos. Y ahora, con peor equipo que el año pasado, con un clima de desconfianza exagerado en el equipo, con Schuster deseando explotar, nos presentamos en la semana previa a la que debería haber sido "nuestra" Champions.
Para colmo, el sorteo ha sido malo. El calendario no lo es tanto. Y, personamente, por primera vez en vez de tener ilusión en ganar la competición, me da miedo que destape nuestras miserias.
Ojalá no sea así.
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