Y ahora qué?

Decepcionante derrota en el Bernabeu en Champions, otro año más. Esta vez venía un equipo inglés especialista en buscar el empate sin goles. Llegaron, hicieron su partido, y cuando estaban a punto de llevarse su esperado 0-0, se encontraron con un gol a balón parado.

Si una eliminatoria se decide por pequeños detalles, hay que evitar conceder al rival más posibilidades de las que es capaz de crear. Si un jugador está de espaldas, sin saber qué hacer, es una tontería hacerle una falta como la que le hizo Heinze, porque le vas a dar una ocasión de dónde no tenía nada. Y si luego no fijas la marca, no se lo puedes poner más fácil.

Pero no toca buscar culpables, aunque aburra ya esta sobreprotección al argentino, y ese pensamiento colectivo de que Marcelo es un mal defensa, cuando 'el gringo' nos ha costado goles y más goles (y la pasada eliminación de Champions, sin ir más lejos). Pero claro, le echa 'casta' y ya lo arrega todo... En fin, es lo que tenemos, y el mister lo va a seguir poniendo, así que hay que solventar ese lastre.

Se decide ahora el pase en Anfield, donde es una incógnita saber cómo planteará el partido el Liverpool. Dudo que salgan a cerrar la eliminatoria, pero me cuesta creer que planteen un partido igual que el de ayer. El Madrid, por su parte, con casi todo perdido, tiene que jugar su única carta. Es vital que los reds no metan gol en la primera parte, aunque nosotros tampoco. Llegar 0-0 al descanso no sería mal resultado, dentro de lo que cabe.

Eso sí, vamos a tener que marcar, y quizá no sea suficiente con un gol. Y en un fútbol que se decide por pequeños detalles, debemos deja cubierto el de los balones parados: es decir, tiene que jugar Sneijder.

Está mucho más complicado que hace 3 días, pero mientras haya vida...

La misma piedra... habrá otro tropezón?

La liga cobra emoción, que falta hacía, y de la mano de la épica. El Madrid, que era sólo era Robben, lleva 10 goles en dos partidos sin el holandés, y el Barça de los records parece perder algo de fuelle. Incluso los jugadores imparables ya no parecen tan imparables.

Hoy ha sido una jornada crucial, el colista gana en el Camp Nou. El colista, curiosamente, es el Espanyol, el equipo que privó del liderato al Barça en aquella mágica tarde del 'tamudazo', hace casi 3 años. Hoy no ha sido Tamudo el artífice, sino De la Peña, otrora niño mimado de la afición, que esta vez celebró cada uno de sus goles como si le fuera la vida en ello, quizás porque esa era realmente la situación de los pericos.

El Barça salió nervioso, con el cagómetro activado, que dirán muchos: La afición lo veía tan fácil que su mayor preocupación fue repetir tantas veces como fuera posible ese famoso grito de 'a segunda, oee'. Pero los jugadores estaban demasiado pasados de revoluciones. Mientras tanto, el Madrid gana, juega bien, está físicamente muy fuerte (se intuía, pero ahora se confirma que las flojas segundas partes en el comienzo de la era Juande eran fruto de una carga de trabajo alta, con el objetivo de llegar bien a estas fechas).

Las dudas han cogido el puente aéreo, y ya nadie discute la calidad de Huntelaar (los mejores partidos del Madrid de Juande coinciden con su titularidad, que piensen que es casualidad), Marcelo se ha convertido en un jugador importante (sí, otro pésimo fichaje de Pedja, pagado por encima de su valor real... mira que dar 6M por el lateral titular de la canarinha... habrase visto), Lass ha tardado muy poco en callar las bocas de los de siempre... Y los capos, Ramos, Iker y Pepe, han vuelto, justo a tiempo.

En los blaugrana, poco que decir. Messi es medio equipo, pero Messi no es dios, tiene derecho a hacer malos partidos. Curiosamente, los malos partidos de Messi repercuten muchísimo en Henry. El Barça es un torrente de fútbol por la derecha, por ahí crea y define, con dos futbolistas excelsos. Por la izquierda define. Es un equipo asimétrico, aunque parezca lo contrario. Y si su manantial de fútbol se seca un poco y el resto de las individualidades no deciden, pues pasa lo que pasa, que la gente empieza a darse cuenta de que ni son el mejor Barça de la historia ni son invencibles.

Además, Eto'o ha vuelto a abrir la caja de los truenos, como aquella vez. Ahora llegarán los nervios, la presión, la Champions... son 7 puntos, el Barça todavía tiene que visitar el Bernabeu. No vale la pena hacer cuentas, sólo ganar, echarles el aliento en el cogote y ver si sus dioses hacen los méritos suficientes como para merecer tal distinción.

Esa es nuestra única arma, junto con la historia. De momento, el Barça parece no querer aprender del pasado. Todavía tienen renta, pero como se descuiden... Nosotros, de paso, nos encomendaremos a San Fabio.

Qué es madridismo?

Aunque no se pueda, aunque no haya tiempo y nos den por muertos... hay que luchar y, sobre todo, creer. Siempre.

Juande, pan para hoy, hambre para mañana

Llegó Juande al Madrid con un reto, coger un equipo roto y arreglarlo, con la vista puesta en la eliminatoria de Champions contra el Liverpool. Llegó también con la garantía de renovar un año más si cumplía el complicadísimo objetivo de ganar un título. Pero los líos del marca, mediaopro, Calderón y la famosa asamblea lo precipitaron todo. Es un secreto a voces que el próximo año no estará aquí.

En esa situación tan complicada en la que se encuentra, ha hecho bien parte de su labor. Lleva 7 victorias seguidas, el equipo no encaja goles (esto es vital para tener opciones en Champions) y está asegurando el segundo puesto en Liga.

Pero... a qué precio?? Era parte fundamental de su plan marginar a Huntelaar, que hoy parece ser que ha declarado que quiere irse?? Es decir, tenemos a un jugador de presente/futuro, que se ha hartado de meter goles en Holanda, y que llega aquí para jugar ni siquiera 20 minutos por partido, y por supuesto nunca de titular. Realmente sería tan grave que el holandés jugara 3 partidos seguidos? Sería tan grave que Raúl descansara o chupara banquillo?

Huntelaar es el caso más grave, pero lo mismo sería aplicable de Drenthe o Marcelo, por no hablar de Palanca. Incluso el recién llegado Faubert ya ha recibido la primera crítica pública de su entrenador. Mientras tanto, Juande dice que no pueden jugar bien hasta que se recupere Guti. Y se queda tan ancho. Y no se atreve a decir nunca ni una palabra de otros, aunque tengan más responsabilidad que Faubert y lo hagan mucho peor.

Es un cobarde. Se siente débil y se apoya en los pesos pesados del club, ignorando y maltratando a jóvenes y nuevos, que son patrimonio del club que le paga. Pero además de cobarde es tonto, porque ese apoyo no le va a dar ni la más mínima oportunidad de renovar. Por suerte.